A petición de SEO/BirdLife, las instalaciones del Club Náutico de Bajamar, localizadas en la costa norte de la isla de Tenerife, junto a una zona de cría de pardela cenicienta canaria, ha adaptado la iluminación exterior de sus instalaciones para reducir el impacto de la contaminación lumínica sobre las aves marinas. El club se había convertido en los últimos años, por el exceso de iluminación, en un punto negro de caída de pollos deslumbrados durante la temporada de salida de los nidos —desde mitad de octubre hasta mitad de noviembre—. En especial, durante las noches de luna nueva, las pardelas convierten las luces artificiales en su referencia para orientarse, y acaban deslumbradas cayendo al suelo.

 

“El cambio de luminarias que ha realizado el Club Náutico de Bajamar – destaca Javier Romero– es un buen ejemplo de que, cuando hay voluntad, es posible marcar la diferencia, dado que las soluciones técnicas ya existen y cada día son más accesibles a todos los bolsillos, demostrando con la reorientación de sus luces y su nueva colocación, que en este caso no se trata de iluminar menos, sino de iluminar mejor. Es un problema que podemos contribuir a solucionar todos, desde las empresas privadas, el ciudadano de a pie o las administraciones públicas”.

 

En este sentido, durante el proyecto LIFE Natura@night se van a modificar el alumbrado público de algunas zonas piloto de los municipios de Mogán (Gran Canaria) y Buenavista del Norte (Tenerife), reduciendo el impacto de la contaminación lumínica sobre la biodiversidad y el ser humano, además de contribuir a la eficiencia energética.