El seminario «Retos de la contaminación lumínica y conservación de la biodiversidad a nivel de la gestión municipal» se celebró el pasado viernes 6 de junio en el Auditorio de la CCDR Alentejo, en Évora.

 

Raul Cerveira Lima destacó el exceso de intensidad luminosa que nos rodea, argumentando que, en muchos casos, podríamos reducir la intensidad de la iluminación en un 90 % y seguiría siendo perfectamente adecuada para la visión humana. Puso como ejemplo los Países Bajos y Holanda, a los que podemos seguir, señalando que en Berlín ya se ve la Vía Láctea, mientras que en Évora no, y mencionó el caso de las Aldeas Estrelladas en Francia. También mencionó la importancia de regular, de imponer límites de emisión, sobre todo con tecnologías como el LED, que abaratan la iluminación.

 

Miguel Claro nos llevó al corazón de Dark Sky® Alqueva con una presentación repleta de fotos y vídeos impresionantes, mientras que Apolónia Rodrigues compartió la experiencia de crear un destino de astroturismo certificado, incluyendo los retos de los cambios políticos que obligan a repeticiones constantes.

 

Cátia Gouveia presentó el proyecto LIFE Natura@night, en el que hemos trabajado con municipios y otros actores clave para reducir la contaminación lumínica en Madeira, Azores y Canarias, y señaló que, a diferencia de otras amenazas, la contaminación lumínica es un área en la que podemos obtener efectos casi inmediatos. También compartió dos manuales de buenas prácticas para reducir la contaminación lumínica, disponibles en la página web del proyecto.

Claudio Ramos compartió la experiencia de un municipio asociado a LIFE Natura@night: un ahorro total de 2,1 millones de euros en alumbrado público durante el transcurso del proyecto. También destacó la instalación de una infraestructura de red que permite controlar de forma remota todo el alumbrado público, parte de un paquete que también permitirá una gestión inteligente del agua en el municipio.

Alicia Pelegrina nos recordó que la luz artificial, desde su invención, siempre ha sido un signo de desarrollo, de clase social alta; a diferencia de otros contaminantes, la luz artificial no se considera algo malo, lo que plantea retos a quienes quieren combatir la contaminación lumínica. Pero es urgente cambiar esta narrativa, afirmó: «¿Alguna vez han visto una luciérnaga? Yo no. En Granada ya no se ven. Y voy a dar charlas en colegios y los niños ni siquiera saben lo que es una luciérnaga».

Azucena de la Cruz presentó los Planes Directores de Iluminación Pública: una herramienta de gestión municipal que va más allá de un manual de buenas prácticas, ya que cada plan director es un conjunto de normas establecidas en función de las particularidades de cada municipio para planificar de forma coherente el espacio público nocturno. También destacó que los seis municipios que implementaron medidas de reducción de la contaminación lumínica en el proyecto LIFE Natura@night recibieron, en total, cero quejas.

 

Por último, Ana Prates, de la CCDR Alentejo, presentó algunas oportunidades de financiación para el trabajo en este ámbito, en el marco del PR Alentejo 2030.